Hasta que nos volvamos a encontrar
Hace un par de noches soñé con compañeros del trabajo que no veo desde que inició la pandemia en el 2020. En el sueño todos estaban con gestos serios reunidos en diferentes salones de una oficina. No recuerdo los diálogos. Luego, algo nos distrajo de la rutina del trabajo y giramos a ver por una ventana muy amplia, afuera había un jardín verdísimo y luminoso que contrastaba con lo oscuridad de la oficina, en donde jugaban unos caballos majestuosos color canela con melenas brillantes, eran todo un espectáculo para la vista. Un sueño especial pero que no reparé en buscar su significado, de haberlo hecho, quizás lo relacionaba con la triste noticia que recibí al dia siguiente. Quiero creer que el sueño fue la forma de decir adiós de Javi, mi compañero de 16 años en la empresa, mi vecino de escritorio. Un profesional del más alto nivel, con una voluntad de acero, y una fortaleza inquebrantable para afrontar con dignidad y valentía sus dolencia...