Desde el corazón
Durante la clase de hebreo la profesora se dio cuenta que era muy retador para su alumna de nivel básico leer las nuevas palabras con fluidez y soltó una frase que quedó en mi mente: Lee desde el corazón. Me sorprendió en forma positiva este nuevo "método" de entender una lengua extranjera. Aprender desde el corazón, pensar, hablar y leer desde el corazón es una forma muy singular para alguien que estudió bajo los parámetros tradicionales. Algunos dirán que entender un idioma nuevo debe basarse en la práctica, en la memoria, escucharlo y leerlo, y además, invoulcrarse con la cultura vinculada a ese lenguaje. Ciertamente, todo eso es muy importante para tener exito pero, ¿y si aprendemos desde nuestro corazón no sería un poco más fácil familiarizarnos hasta el punto que las palabras nos salgan de manera sencillas? Decidí entonces empezar a usar al corazón para mejorar mi aprendizaje sin estar muy segura en qué resultaría del experimento. Cerré los ojos...